El gobierno de los riesgos del Grupo Enel se basa en un conjunto estructurado y formalizado de elementos que se definen y actualizan periódicamente en línea con la evolución de los negocios del Grupo, con la norma internacional de gestión de riesgos ISO 31000:2018 y con las mejores prácticas de gestión de riesgos.
Estás viendo el sitio en español. Puedes cambiar el idioma o cerrar y continuar.
ENGLISH
Gestión de Riesgo
El modelo de Gobierno del Riesgo del Grupo Enel se basa en dos principios: los pilares de la gobernanza del riesgo y el catálogo de riesgos.
Pilares de la Gobernanza del Riesgo
1.
Líneas de defensa
El modelo se estructura a través de tres líneas de defensa para las actividades de gestión, seguimiento y control de riesgos.
2.
Comité de riesgos del Grupo
Este Comité, creado a nivel directivo y presidido por el Consejero Delegado del Grupo Enel, tiene a su cargo la orientación estratégica y la supervisión de la gestión de riesgos.
3.
Directorio
Órgano responsable de monitorear y controlar los principales riesgos relativos a la Compañía y sus subsidiarias, incluyendo cualquier riesgo que pueda afectar la sostenibilidad en una perspectiva de mediano o largo plazo, determinando el grado de compatibilidad de dichos riesgos con los objetivos estratégicos establecidos.
4.
Marco de apetito por el riesgo
Constituye el marco de referencia para determinar el nivel tolerable de riesgo. Formalizado expresamente en el catálogo de riesgos del Grupo.
5.
Política de riesgo
Permite desarrollar procesos para la medición, asignación de responsabilidades, los mecanismos de coordinación y las principales actividades de control de riesgos.
6.
Sistema de reportes
Para informes continuos y estructurados a los responsables de la toma de decisiones sobre las principales exposiciones al riesgo a nivel global, por cada línea de negocio o área geográfica significativa.
El catálogo de riesgos
Los riesgos se definen en un catálogo de riesgos que sirve de referencia para todas las áreas del Grupo Enel y para todas las unidades involucradas en los procesos de gestión y seguimiento. La adopción de un lenguaje común facilita el mapeo y representación integral de los riesgos dentro del Grupo, permitiendo así la identificación de aquellos que impactan en los procesos del Grupo y los roles de las unidades organizacionales involucradas en su gestión.